Declaración conjunta - 1917 - 2017:
¡Este 7 de noviembre de 2017, celebramos
los cien años de la revolución de octubre, que en 1917 llevó a Rusia al
socialismo, a través de una insurrección armada seguida de una guerra civil
entre los ejércitos rojo y blanco.
Decimos que este camino todavía es
válido hoy; en cada país capitalista, un levantamiento revolucionario debe ser
liderado por el partido revolucionario de vanguardia, movilizando a las masas
para que tomen el poder de destruir el viejo estado de una manera violenta
necesaria.
La insurrección, es decir, la toma del
poder central, es la tarea revolucionaria de los comunistas reales; el objetivo
no es reformar o mejorar el capitalismo, sino derrocarlo. El viejo estado no
puede ser enmendado, debe ser destruido y reemplazado por el poder de los
soviets, el estado socialista.
La naturaleza del trabajo de los
comunistas, por lo tanto, debe ser conforme a este objetivo revolucionario. ¡El
objetivo del trabajo de los comunistas es movilizar a las masas para el
resurgimiento global! ¡El pueblo en armas debe ser el Nuevo Estado!
Por lo tanto, los comunistas deben ser
conscientes de la capacidad de represión del viejo estado y sus aliados, como
los fascistas y la mafia; deben comprender la caracterización de cada período
para que funcione correctamente a lo largo de la dialéctica de la legalidad y
la ilegalidad. Además, y decimos que esta es la clave principal de la pregunta,
cada aspecto debe verse en relación con el objetivo de tomar el poder, lo que
significa que cada proceso revolucionario debe ser evaluado desde el punto de
vista de la Guerra Popular: el confrontación viejo estado / masas.
No se trata de encontrar una herramienta
de intervención “mágica”, ya sea propaganda armada o electoralismo. Siempre se
trata de evaluar cada situación de acuerdo con el objetivo estratégico de la
insurrección armada, con la toma del poder central.
Cada “victoria” que no corresponde a
esta tarea es incorrecta, en cualquier campo (economía, política, cultura,
etc.). Una victoria significa avanzar en la dirección del objetivo estratégico.
El poder político surge del cañón del fusil. Significa también que el camino es
político. La política revolucionaria solo es posible a través de un pensamiento
guía, es decir, una posición correcta sobre la historia de un país dado, para
mostrar el camino correcto para realizar la contradicción revolucionaria.
Queremos enfatizar aquí que las
condiciones específicas para la Revolución de Octubre ciertamente no se
repetirán, ya que la Guerra Popular ocurrió solo después de la insurrección, a
través de la guerra civil. Lo que sucederá más seguramente es un proceso
revolucionario en el cual la toma del poder central ocurre solo al final, como
en la revolución china.
Cuando decimos: “¡el objetivo sigue
siendo la insurrección!”, No queremos decir con eso que la insurrección sería
el comienzo de un proceso revolucionario, sino solo su clímax. La actividad
revolucionaria no consiste en la acumulación de fuerzas, en organizar un
“golpe”. La actividad revolucionaria existe solo como un proceso general, en el
cual se construye un Nuevo Poder, reemplazando por violencia al anterior.
Con esto en mente, queremos enfatizar la
importancia de comprender el principio de la Democracia Popular, que consiste
en la amplia alianza de la fuerza antimonopolística, contra la guerra y el
fascismo. El objetivo revolucionario de tomar el poder central pertenece a la
ofensiva estratégica de la revolución, pero un equilibrio estratégico puede ser
históricamente necesario en una situación en la que el fascismo y la guerra son
el principal aspecto político. De hecho, esta puede ser incluso la regla para
la revolución en los países imperialistas.
Un último punto que queremos enfatizar
es que es imposible separar la Revolución de Octubre de la URSS bajo el
liderazgo de Stalin. Stalin fue el líder de la construcción socialista en el
primer estado socialista en el mundo; La defensa de la revolución de octubre es
la defensa de Stalin, la defensa de Stalin es la defensa de la revolución de
octubre.
La razón de esto es que el verdadero
sentido de la revolución de octubre es la base del nuevo estado socialista.
Revolución significa la aparición victoriosa de un nuevo estado. Este es un
aprendizaje básico del materialismo dialéctico. Esta es la razón por la cual,
dado que la propia naturaleza del estado depende del proceso revolucionario, no
es posible comprender la cuestión del estado sin comprender que es una cuestión
práctica.
Es por eso que históricamente Karl Marx
tuvo que esperar a la Comuna de París de 1871 para comprender la forma de la
dictadura del proletariado; es por eso que Lenin entendió la forma del nuevo
estado socialista a través del proceso revolucionario mismo.
En agosto de 1917, Lenin explica, en el
prefacio de la Primera Edición de El estado y la revolución, la naturaleza real
del tema que está estudiando en ese momento, en el período comprendido entre la
revolución de febrero y la revolución de octubre por venir:
“Antes que nada, examinamos la teoría de
Marx y Engels del estado, y nos concentramos en detalles particulares sobre
aquellos aspectos de esta teoría que son ignorados o han sido distorsionados
por los oportunistas.
Luego tratamos especialmente con el
principal responsable de estas distorsiones, Karl Kautsky, el líder más
conocido de la Segunda Internacional (1889-1994), que se ha encontrado con una
bancarrota tan miserable en la presente guerra.
Por último, resumimos los principales
resultados de la experiencia de las revoluciones rusas de 1905 y
particularmente de 1917.
Aparentemente, el último es ahora
(principios de agosto de 1917) completando la primera etapa de su desarrollo;
pero esta revolución como un todo solo puede entenderse como un eslabón en una
cadena de revoluciones proletarias socialistas causadas por la guerra
imperialista.
La cuestión de la relación de la
revolución proletaria socialista con el estado, por lo tanto, está adquiriendo
no solo importancia política práctica, sino también la importancia de un problema
más urgente del momento, el problema de explicar a las masas lo que tendrán que
hacer en poco tiempo para liberarse de la tiranía capitalista”.
El pensamiento Lenin nace como expresión
de la revolución rusa y se le permite comprender mejor la naturaleza del
estado. Como Stalin lo explicó en Los fundamentos del leninismo:
“Algunos piensan que lo fundamental en
el leninismo es la cuestión campesina, que el punto de partida del leninismo es
la cuestión del campesinado, de su papel, su importancia relativa. Esto es
absolutamente incorrecto
La cuestión fundamental del leninismo,
su punto de partida, no es la cuestión campesina, sino la cuestión de la
dictadura del proletariado, de las condiciones bajo las cuales puede lograrse,
de las condiciones bajo las cuales puede consolidarse. La cuestión campesina,
como la cuestión del aliado del proletariado en su lucha por el poder, es una
cuestión derivada”.
Lo que Stalin señala aquí es el aspecto
universal en la situación particular del leninismo como expresión de la revolución
rusa. Esto se debe a esta comprensión correcta de que Stalin sigue
directamente, como líder del Partido Comunista de la Unión Soviética
(bolcheviques), a Lenin en la orientación del nuevo estado en la construcción
socialista.
No es posible separar a Lenin de Stalin
y Stalin de Lenin, ya que Stalin es el sucesor, el que señaló que el leninismo
fue un desarrollo del marxismo, el que dirigió el partido en la profundización
de la construcción socialista, del estado socialista. Aquí encontramos el trasfondo
de la diferencia básica entre el marxismo y el anarquismo, el marxismo y el
oportunismo. El estado no es ni para negar ni para reformar. El estado se
construirá sobre una base nueva.
Este es el aspecto principal de la
enseñanza que viene de octubre de 1917. No se trata solo de derrocar el viejo
estado, que es una reducción revisionista del leninismo a una concepción
mecánica del poder. Significa: desde la vanguardia abriendo el espacio
ideológico revolucionario, pudiendo sintetizar el antagonismo, organizando los
elementos más avanzados que buscan la autonomía de clase, generan organismos de
masas revolucionarios, construyen el nuevo poder, ¡hasta la insurrección!
Centro marxista leninista maoísta de
Bélgica
Partido Comunista de Francia
(marxista-leninista-maoísta)
Noviembre de 2017
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Version en Inglés
Joint declaration - 1917 – 2017: the goal
is still the insurrection !
This 7th of November 2017, we celebrate
the hundred years of the October revolution, which in 1917 led Russia to
socialism, through an armed insurrection followed by a civil war between the
red and the white armies.
We say that this path is still valid
today ; in each capitalist country, a revolutionary upsurge must be led by
the avant-guard revolutionary party, mobilizing the masses so that they take
the power in destroying the old state in a necessary violent way.
The insurrection, i.e. the taking of the
central power, is the revolutionary task of the real communists ; the goal
is not to reform or to ameliorate capitalism, but to overthrow it. The old
state can not be amended, it has to be destroy and replaced by the power of the
soviets, the socialist state.
The nature of the work of the Communists,
therefore, must be conform to this revolutionary goal. The aim of the work of
the Communists is to mobilize the masses for the global upsurge ! The
people in arms must be the New State !
The communists must therefore be aware of
the capacity of repression of the old state and its allies, like the fascists
and the mafia ; they must understand the characterization of each period
to work properly along the dialectics of legality and illegality. Moreover, and
we say that this is the main key of the question, each aspect must be seen in
relationship with the goal of taking power, which means that each revolutionary
process has to be evaluated from the point of view of the People’s War :
the confrontation old state/masses.
It is not a question of finding a “magic”
tool of intervention, be it armed propaganda or electoralism. It is always a
question of evaluating each situation according to the strategic goal of the
armed insurrection, with the taking of the central power.
Each “victory” which does not correspond
to this task is incorrect, on any fields (economy, politics, culture, etc.). A
victory means moving forward in direction of the strategical goal. Political
power grows out of the barrel of a gun. It means also that the way is a
political one. Revolutionary politics is only possible through a guiding thought,
i.e. a correct position on the history of a given country, to show the correct
path to realize the revolutionary contradiction.
We wish to stress here that the specific
conditions for the October Revolution certainly won’t repeat itself, as the
People’s War happened only after the insurrection, through the civil war. What
shall happen more surely is a revolutionary process in which the taking of the
central power occurs only at the end, like for the Chinese revolution.
When we say : “the goal is still the
insurrection !”, we don’t mean by that that the insurrection would be the
beginning of a revolutionary process, but only its climax. The revolutionary
activity does not consist in the accumulation of forces, to organize a “coup”.
The revolutionary activity exists only as a general process, in which a New
Power is build, replacing by violence the old one.
With this in mind, we want to stress the
importance of understanding the principle of People’s Democracy, which consists
in the broad alliance of the anti-monopolies force, against war and fascism.
The revolutionary goal of taking the central power belongs to the strategical
offensive of the revolution, but a strategical equilibrium may be historically
necessary in the situation where fascism and war are the main political aspect.
In fact, this may be even the rule for the revolution in the imperialist
countries.
A last point we wish to stress, is that it
is impossible to separate the October Revolution from the USSR under the
leadership of Stalin. Stalin was the leader of the socialist construction in
the first socialist state in the world ; defending the October revolution
is defending Stalin, defending Stalin is the defending the October revolution.
The reason for that is that the very sense
of the October revolution is the foundation of the new socialist state.
Revolution means the victorious emergence of a new state. This is a basic
learning of dialectical materialism. This is why, as the very nature of the
state is depending of the revolutionary process, it is not possible to
understand the question of the state without understanding that it is a
practical one.
That’s why historically Karl Marx had to
wait the Commune of Paris of 1871 to understand the form of the dictatorship of
the proletariat ; that’s why Lenin understood the form of the new
socialist state through the revolutionary process itself.
In August 1917, Lenin explains, in the
preface to the First Edition of The state and revolution, the
actual nature of the topic he’s studying then, in the period between the
February revolution and the October revolution to come :
“First of all we examine the theory of
Marx and Engels of the state, and dwell in particular detail on those aspects
of this theory which are ignored or have been distorted by the opportunists.
Then we deal specially with the one who is
chiefly responsible for these distortions, Karl Kautsky, the best known leader
of the Second International (1889-1914), which has met with such miserable
bankruptcy in the present war.
Lastly, we sum up the main results of the
experience of the Russian revolutions of 1905 and particularly of 1917.
Apparently, the latter is now (early
August 1917) completing the first stage of its development ; but this
revolution as a whole can only be understood as a link in a chain of socialist
proletarian revolutions being caused by the imperialist war.
The question of the relation of the
socialist proletarian revolution to the state, therefore, is acquiring not only
practical political importance, but also the significance of a most urgent
problem of the day, the problem of explaining to the masses what they will have
to do before long to free themselves from capitalist tyranny.”
Lenin Thought is born as expression of the
Russian revolution and permitted to have a better understand of the nature of
the state. As Stalin explained it in The Foundations of Leninism :
“Some think that the fundamental thing in
Leninism is the peasant question, that the point of departure of Leninism is
the question of the peasantry, of its role, its relative importance. This is
absolutely wrong.
The fundamental question of Leninism, its
point of departure, is not the peasant question, but the question of the
dictatorship of the proletariat, of the conditions under which it can be
achieved, of the conditions under which it can be consolidated. The peasant
question, as the question of the ally of the proletariat in its struggle for
power, is a derivative question.”
What Stalin points here is the universal
aspect in the particular situation of Leninism as expression of the Russian
revolution. This is because of this correct understanding that Stalin follows
directly, as leader of the Communist Party of the Soviet Union (Bolsheviks),
Lenin in guiding the new state in the socialist construction.
It is not possible to separate Lenin from
Stalin and Stalin from Lenin, as Stalin is the successor, the one who noted
that Leninism was a development of Marxism, the one who led the Party in the
deepening of the socialist construction, of the socialist state. We find here
the background the basic difference between Marxism and anarchism, Marxism and
opportunism. The state is neither to negate, nor to reform. The state is to be
built on a new foundation.
This is the principal aspect of the
teaching coming from October 1917. It is not only a question of overthrowing
the old state, which is a revisionist reduction of Leninism to a mechanical
conception of power. It means : from the avant-guard opening the
ideological revolutionary space, being able to synthesize antagonism,
organizing the most advanced elements seeking class autonomy, generate
revolutionary mass organisms, build the new power, until the
insurrection !
Marxist Leninist Maoist Center of Belgium
Communist Party of France
(Marxist-Leninist-Maoist)
November
2017
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